Qué ver y hacer en Marsella, Francia

¿Qué ver en Marsella y alrededores?

Descubre los lugares imprescindibles a visitar en Marsella, una ciudad que se caracteriza por su puerto, su ambiente multicultural y su rica historia.

Catedral de Marsella

Más conocida como la Catedral de La Mayor, su estilo románico-bizantino contrasta con su entorno modernista. Es la única catedral construida en el siglo XIX, momento en el que la ciudad experimentaba un crecimiento económico y demográfico muy fuerte. Su ubicación fue meditada: cerca del nuevo puerto comercial, trasladado del Puerto Viejo a La Joliette. Era aquí donde los barcos llegados de todo el mundo verían el poder y la belleza de Marsella a gran distancia.

La primera piedra de La Mayor fue colocada el 26 de septiembre de 1852 por Luis Napoleón Bonaparte, según los planos de Léon Vaudoyer. Se considera una de las mayores catedrales construidas en este país desde la Edad Media, con una cúpula principal de casi 70 m de altura y 18 m de diámetro. Fue declarada monumento histórico en 1906. Su arquitectura combina estilos romanos y orientales, y los materiales utilizados en su construcción son muy variados: mármol blanco de Cararre, piedra verde de Florencia, piedra de Calissanne y del Gard, ónice de Italia y Túnez, o mosaicos de Venecia.

Abadía de San Víctor de Marsella

Esta abadía francesa fue fundada en el siglo V por Saint Jean-Cassien cerca de las tumbas de los mártires de Marsella, entre los que se encontraba San Víctor de Marsella, que le dio nombre a la abadía. Desde hace más de 1700 años es uno de los lugares más importantes del catolicismo del sur de Francia y aunque el monasterio se disolvió durante la Revolución francesa, la iglesia aún se utiliza. Fue restaurada en el siglo XIX y hoy en día se ha convertido, después del Louvre y el Museo de la Antigüedad de Arlés, en un verdadero escaparate del arte paleocristiano a descifrar en sus numerosos sarcófagos.

La visita a este edificio y sus criptas te sumergen en el pasado religioso de la ciudad y ofrece una vista espectacular del Puerto Viejo. De hecho, su torre se ha convertido en una referencia del paisaje de la ciudad. Además, cada año, en la época de la Candelaria, se celebra una importante peregrinación. En la mañana del 2 de febrero, una procesión parte del Puerto Viejo hacia la abadía de Saint-Víctor por la calle Sainte. La Virgen Negra conservada en las criptas es vestida con su manto verde y presentada a la multitud. Después el arzobispo hace sus bendiciones a la virgen, a la ciudad y a las pequeñas galletas llamadas «navettes», típicas de Marsella.

Puerto Viejo (Vieux-Port)

El Puerto Viejo de Marsella es otro de los símbolos de la ciudad. Es aquí donde se celebran encuentros y grandes acontecimientos, y el lugar donde, además de pasear por sus muelles, puedes disfrutar de todo tipo de actividades:

• Visitar el mercado de pescado que se celebra todos los días de 7.30 a 12.30 h en el Quai des Belges, justo al lado de la boca de metro del Vieux-Port.
• Visitar el mercado de flores (martes y sábados por la mañana).
• Sacarte un selfie bajo la Ombrière: Diseñado por el arquitecto británico Norman Foster, se trata de una especie de marquesina formada por 120 paneles de acero inoxidable. Tiene unas dimensiones de 22 x 48 metros y tiene como función acoger a los transeúntes que esperan a los barcos y acoger eventos como mercados, conciertos o espectáculos.
• Subir a bordo del Ferry Boat de Marsella que une los dos muelles del Vieux-Port y que cuenta con más de 130 años de historia. Desde 2010 se puso en servicio un ferry más respetuoso con el medio ambiente, con propulsión electrosolar. Hoy en día, los dos barcos comparten las travesías.
• Visitar la iglesia de Saint-Ferréol: Es un vestigio del siglo XVI que bordea el Puerto Viejo de Marsella.

El Vieux-Port de Marsella ha sido el lugar donde se ha desarrollado la historia de la ciudad. Es aquí donde nació la antigua colonia griega Massalia, que se convertiría en la Massilia romana, y donde más tarde se construiría la Marsiho medieval. Desde entonces, la entrada al puerto está vigilada por el Fuerte Saint-Nicolas y el Fuerte Saint-Jean. Rodeada de colinas calcáreas, la ciudad se inclina naturalmente al Mediterráneo.

Basílica de Notre-Dame de la Garde

Figura emblemática de la ciudad de Marsella, vela por los marineros, los pescadores y todos los marselleses. En la ciudad es conocida como la «Buena Madre» y actualmente es el monumento más visitado de Marsella. Desde lo alto de la colina de la Garde (154 m de altura), ofrece una vista panorámica única a toda la ciudad y al mar Mediterráneo. La basílica es visible desde casi cualquier lugar de Marsella.

Para proteger Marsella de los ejércitos de Carlos V, en 1524 se construyó un fuerte para la defensa marítima de la ciudad y sobre el cual se levanta la actual basílica. Pero durante la Edad Media ya se habían construido varias capillas, estableciendo la vocación religiosa de este lugar. Desde este entonces, la colina de La Garde tuvo una triple vocación: puesto de vigía, estructura militar y lugar de culto y peregrinación. A mediados del siglo XIX, el santuario resultó demasiado pequeño para los numerosos peregrinos que lo visitaban, por lo que se decidió construir la gran basílica de Notre-Dame de la Garde, formada por 3 campanas, entre ellas la famosa «bourdon» de más de 8 toneladas.

Si quieres saber cómo llegar a Notre-Dame de la Garde, puedes hacerlo a pie (unos 45 minutos desde el Vieux-Port y cuesta arriba), en trenecito turístico (circuito nº1 del Petit Train de Marseille), en autobús urbano (utilizando la línea n.º60), en autobús turístico (Colorbüs Marseille), en taxi o en tuctuc. A tener en cuenta que la basílica y su cripta no son accesibles durante los horarios de misas o celebraciones.

¿Quieres saber unos datos curiosos para contar a tus familiares o amigos? El primero es que la Virgen de 11,20 metros de altura está hueca (hay una escalera que lleva a los ojos de la estatua, pero está cerrada al público) y mira al mar y no a su hijo, ya que lo está presentando al mundo. Otra curiosidad es que, de 1892 a 1967 hubo un funicular desde la rue Jules Moulet hasta 80 metros más arriba. Y desde 2023, el moto club Massilia organiza una bendición de moteros en la basílica el lunes de Pentecostés.

Otros sitios que visitar

• Le Panier: Antiguo barrio de pescadores, también conocido como el barrio de los artistas.
• Boulevard Longchamp: Se caracteriza por sus lujosos edificios del siglo XIX y su impresionante palacio Longchamp.
• Cours Julien: El barrio bohemio que reune a artistas y estudiantes.
• Vallon des Auffes: Este encantador y pintoresco pueblo pesquero vive pegado a la ciudad. Un rincón de casas coloridas y barcas perfecto para relajarse y comer en alguno de sus restaurantes.
• Canebière: Avenida comercial emblemática de la ciudad, conocida popularmente como los "Champs Élysées" de​ Marsella.
• Estaque: Este barrio pintoresco borde el Puerto Viejo y se caracteriza por sus pequeñas casas tradicionales y a orillas del mar.
• La Cité radieuse – Le Corbusier: Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, este conjunto de apartamentos se caracteriza por su arquitectura creativa y vanguardista juega con la luz, las perspectivas y los colores.
• Museo de las Civilizaciones de Europa y del Mediterráneo (MuCEM): Centro dedicado a conservar y divulgar la cultura de las civilizaciones de la región mediterránea.
• Museo del Jabón de Marsella: Se ubica en la antigua Savonnerie du Midi, una de las últimas fábricas de jabón históricas de la Provenza.
• Parc National Des Calanques
• Castillo de If

10 cosas que hacer en Marsella, la capital de Provenza

• Reservar un free tour por Marsella: La mejor forma de conocer la historia y curiosidades de la ciudad es hacer una visita con un guía que habla español.
• Reservar el autobús turístico de Marsella: Durante 24 horas puedes subir y bajar las veces que quieras de este autobús descapotable de dos plantas. La ruta incluye 14 paradas y es una forma práctica de recorrer la ciudad.
• Navegar hasta el castillo de If: Sube a bordo de un barco en el Puerto Viejo que te lleve hasta la célebre fortaleza del siglo XVI se construyó para proteger la costa marsellesa, pero desde 1800 se convirtió en una prisión. Puedes comprar entradas al castillo de If para descubrir su interior.
• Reservar una excursión a los campos de lavanda: Si hay algo que caracterice a la Provenza, son sus campos de lavanda. Disfruta de una experiencia sensitiva única llena de olor y color en este tour de la lavanda por Valensole, Gordes y Roussillon.
• Pasear por La Corniche: Disfruta de un bonito recorrido junto al mar de poco más de 4 kilómetros, desde la playa de los Catalanes hasta la playa Parque du Prado.
• Comprar la Marseille City Pass: Recomendable para todos aquellos que quieran visitar muchos museos y otros lugares turísticos en poco tiempo. El pase se puede comprar para 24, 48 o 72 horas e incluye el barco o autobús turístico, el uso ilimitado del transporte público, así como descuentos en actividades turísticas y culturales.
• Reservar una excursión a las islas y calanques de Marsella: Esta joya de la biodiversidad con playas de arena fina y calas de agua turquesa. Desde el  Vieux-Port hay diferentes compañías navieras que ofrecen esta excursión que merece la pena. 
• Reservar una excursión a Arlés, Saint Rémy y Les Baux: Te recomendamos conocer tres de las ciudades más importantes de la Provenza en este recorrido desde el Imperio Romano del siglo I hasta las pinturas de Van Gogh o Dalí.
• Probar las mejores «navettes»: Cerca de la Abadía de San Víctor se encuentra la panadería más antigua de Marsella, llamada “Four des Navettes”. Tiene fama de vender las mejores «navettes», que es como se llaman a las típicas galletas de Marsella con forma de barca.
• Probar la bullabesa: Uno de los platos tradicionales de Marsella, se trata de una sopa de pescado con pequeños picatostes, ajo, salsa “rouille” y patatas.

Tiempo en Marsella a lo largo del año

Marsella cuenta con un clima mediterráneo, donde predominan los inviernos suaves y los veranos calurosos, mayormente despejados y secos. La ciudad puede presumir de tener casi 300 días de sol al año y la temperatura generalmente varía de 4 °C a 29 °C a lo largo de todo el año.

Invierno

Los inviernos son suaves, con temperaturas mínimas que pueden bajar a los 5ºC y rara vez alcanzan valores negativos. La temperatura máxima promedio diaria es menos de 15 °C. El mes más frío del año en Marsella es enero, con una temperatura mínima promedio de 4 °C y máxima de 12 °C.

Primavera

En primavera las temperaturas van subiendo gradualmente, con máximas entre 10 y 20ºC, en función del mes. Valores similares a los que se alcanzan en otoño.

Verano

La temperatura máxima promedio supera los 25 °C durante el verano y el mes de julio es el más cálido del año en Marsella, con una temperatura máxima promedio de 28 °C y mínima de 19 °C. Además de calor, lo habitual es que haya sol. El verano es la época más despejada del año y el mes de julio en particular, durante el cual en promedio el cielo está despejado o parcialmente nublado el 82 % del tiempo. Esto significa que es muy poco probable que tengas que usar el paraguas. De hecho, en el mes de julio, estadísticamente no llueve más de 2 días en todo el mes.

Sin embargo, la ciudad de Marsella, debido a su ubicación junto al mar, tiene una humedad relativa alta durante todo el año. Y concretamente el verano es el periodo más húmedo del año, con posible sensación de bochorno. Por estadística, el mes de agosto es el peor, con una media de 7 días bochornosos al mes.

Otoño

De septiembre a mayo es cuando hay mayor probabilidad de que llueva, y concretamente el mes de octubre es el más lluvioso en Marsella, aunque el promedio es de 7 días de lluvia al mes. De hecho, durante octubre, el cielo está nublado o mayormente nublado el 45 % del tiempo (valor promedio).

Dónde alojarse en Marsella

El centro de Marsella no es grande y puedes moverte andando sin necesidad de utilizar el transporte público. Si quieres estar cerca de los principales lugares turísticos, te recomendamos alojarte lo más cerca posible del Vieux-Port y la avenida Canebière. Gracias a su céntrica ubicación la convierte en una de las mejores zonas donde alojarse en Marsella, aunque también es de las más caras. De todas formas, también es posible encontrar hoteles en el centro de Marsella a un precio razonable.

Ya sea porque buscas una zona más económica donde alojarse en Marsella o porque buscas un barrio menos turístico, también puedes valorar otras zonas de la ciudad. Por ejemplo, al noroeste del puerto está el barrio de Le Panier, el más antiguo de la ciudad. Callejuelas peatonales y terrazas en un barrio en el que se respira tranquilidad. 

Si en las zonas que hemos comentado hasta ahora no encuentras un alojamiento que se ajuste a lo que buscas, puedes mirar hoteles en Cours Julien. Situado al este del puerto, este barrio bohemio lleno de callejuelas es el punto de encuentro de artistas y estudiantes. Al atardecer, te recomendamos acercarte a la plaza Jean Jaurès, donde sus terrazas se llenan de gente. 

La zona de Saint-Charles, donde se encuentra la estación de tren, no está demasiado lejos del centro. Sin embargo, no te recomendamos alojarte aquí. Al igual que ocurre en otras muchas ciudades de Francia, los alrededores de la estación puede generar cierta sensación de inseguridad, además de no contar con nada especial para visitar.

Mejores playas de Marsella

Si viajas a Marsella en verano y tienes ganas de tomar el sol o darte un baño en el mar, no hace falta salir de la ciudad. La playa de Catalans es la más céntrica y se encuentra muy cerca del Puerto Viejo. Es una playa de arena muy frecuentada por familias y gente joven jugando a voleibol, que cuenta además con un chiringuito y restaurantes cercanos. 

Si nos desplazamos unos 3 km hacia el sur, hay varias playas seguidas y vamos a mencionar algunas de ellas. La playa de Prophète de arena bastante pequeña en la que suele haber muchas familias con niños disfrutando de la piscina natural vigilada. Por otro lado, las playas de Prado son conocidas por sus 3,5 km de playa de piedras rodeada de césped. Están vigiladas y disponen de zonas de juegos. Enfrente se sitúa Borely, un centro comercial con restaurantes, tiendas y actividades. Al final de estas playas se encuentra la playa de Pointe Rouge, protegida del viento. Cuenta con restaurantes, casitas, barcas de pedales, gente practicando windsurf... ¡todo lo que necesitas para un día perfecto de playa! Y muy cerca también está la playa de Vieille Chapelle que te enamorará por su agua cristalina.

De todas formas, si tienes tiempo y facilidad para llegar hasta allí, nuestro consejo es que visites las playas y calas de las Calanques. En verano hay demasiados turistas, por lo que te recomendamos ir muy temprano. Puedes visitar diferentes calas, como Sormiou, Morgiou, Sugiton, Port-Miou, Callelongue y Marseilleveyre.

Consejos para tu viaje a Marsella

Cuando organizas un viaje a una ciudad que no has visitado antes, lo normal es que te surjan algunas dudas. Aquí van algunos consejos básicos para tu próximo viaje a Marsella.

Cómo llegar a Marsella

El aeropuerto de Marsella cuenta con vuelos directos a unas pocas ciudades españolas. Si viajas desde Barcelona, también puedes optar por el Tren de Alta Velocidad, que te llevará hasta Marsella en unas 5 h (lo mismo que si viajas en coche) si optas por el tren directo de Renfe. Si eliges un viaje con transbordo (que normalmente de realiza en la ciudad de Narbonne), tardarás un poco más. Por otro lado, en el caso de que te desplaces en coche hasta Marsella, la autopista A9 transcurre junto a la costa Mediterránea, permitiendo llegar a la frontera con Cataluña en 3 horas.

Transporte público de Marsella

Se trata de una ciudad muy manejable por la que puedes moverte andando, especialmente para aquellos que se limiten a visitar las zonas más turísticas. En cualquier caso, el transporte público de la ciudad es eficiente y accesible, facilitando la movilidad de sus habitantes y visitantes. La amplia red de transporte público de Marsella está formada por autobuses, tranvías y el metro. Pero también cuenta con pequeños barcos para moverte de una zona de la costa (o del puerto) a otra. Te recomendamos utilizar Google Maps para decidir qué medio de transporte te conviene en función del origen y destino de tu trayecto.

Dónde comer en Marsella

Marsella es una ciudad grande y moderna que ofrece opciones para todos los gustos y bolsillos. Aprovecha tu viaje para descubrir los mejores restaurantes de pescado de Marsella, donde comer la tradicional bullabesa. La zona del Puerto Viejo de Marsella es una de las mejores si buscas comer pescado. Y en el caso de que busques otro tipo de comida y locales más modernos, te recomendamos perderte por las calles de Panier o Saint-Victor.

Preguntas frecuentes

Resolvemos las dudas más frecuentes sobre Marsella.

• ¿Cuál es la mejor época para ir a Marsella?
• ¿Cuántos días se necesitan para visitar Marsella?
• ¿Cuánto tarda el AVE a Marsella?
• ¿Vale la pena visitar Marsella para los turistas?
• ¿Marsella es peligrosa?

¿Cuál es la mejor época para ir a Marsella?

La mejor época para visitar Marsella para hacer turismo, para lo cual la mayoría de personas buscan días despejados y sin lluvia y temperaturas entre 18 °C y 27 °C, es desde finales de mayo hasta finales de junio y desde principios de septiembre hasta principios de octubre.

¿Cuántos días se necesitan para visitar Marsella?

En un día y medio, o dos si quieres hacerlo más tranquilamente, puedes visitar los lugares imprescindibles de Marsella. Si tienes más tiempo, nosotros te recomendamos aprovecharlo para hacer algunas de las excursiones de las que hemos hablado antes. Y si tu viaje es en verano, no lo dudes y visita las playas y calas de los Calanques. 

¿Cuánto tarda el AVE a Marsella?

Depende de la ciudad desde la que viajes, pero por tener dos de referencia, desde Barcelona - Sants el tren directo tarda 5 horas. Mientras que si viajas desde Madrid – Puerta de Atocha, el tren directo tarda 8 horas y 15 minutos. Puedes reservar ambos trayectos directos (sin transbordos) desde la web oficial de Renfe.

¿Vale la pena visitar Marsella para los turistas?

Analizando el conjunto de la ciudad de Marsella podemos decir que no es la ciudad más bonita de Francia. La arquitectura y ambiente de muchos de sus barrios no tienen nada de especial para los turistas. Sin embargo, Marsella cuenta con un patrimonio histórico interesante, con lugares y barrios específicos que sí merecen la pena visitar. Además, sus alrededores cuentan con varias joyas naturales, como las las playas y calas de los Calanques. No es algo que no exista en otros lugares del Mediterráneo, pero eso no quita para que sea algo que bien merezca una visita.

¿Marsella es peligrosa?

Marsella es una ciudad de ambiente multicultural que durante años ha tenido fama de ser peligrosa. Esta percepción ha ido cambiando durante los últimos años, gracias a las numerosas mejoras en seguridad e infraestructuras. Actualmente podemos decir que las zonas céntricas y turísticas son seguras, tales como el Vieux Port, Le Panier y los alrededores de Notre Dame de la Garde. Las zonas más problemáticas de la ciudad, especialmente de noche, se encuentran al norte del centro, pero están fuera de las rutas turísticas. Salvo que te alojes allí, no tienes por qué frecuentar dichas zonas.